En una noche especial, el equipo de los Texans confirmó que lo de las últimas siete semanas no fue de suerte o de regalos del rival. Su triunfo de 34-17 sobre los Tennessee Titans fue contundente. El equipo dominó en todo aspecto del partido. Los Texans entran a los últimos cinco partidos de la temporada regular en completo control de su destino y con la oportunidad de asegurar un puesto entre los mejores dos de la conferencia.
Los Texans ganaron el partido sobre los Titans con un estupendo dominio de la línea de golpeo. Primero la defensa cambió el partido en lo que fue la jugada de cuarto down que intentaron convertir los Titans en la yarda tres de los Texans. Zac Cunningham, quien regresó a la cancha después de haberse perdido un par de partidos con lesión, frenó las esperanzas de los Titans al congelar el acarreo del ala cerrada suplente. En la siguiente jugada, Lamar Miller salió disparado por la banda derecha en su acarreo de 97 yardas para TD. Miller a propósito, es el único jugador en la historia de la NFL con dos acarreos de 97 yardas para TD en su carrera. Los Texans como equipo acumularon 281 yardas por tierra en 34 acarreos, nuevo récord de equipo. Alfred Blue por su parte logró 49 yardas 13 acarreos.
Claro todo esto se dio después de que los Texans le dieron la bienvenida a Demaryius Thomas con su primero de dos TD como Texans que anotó en el partido. Poco a poco la más reciente adquisición del equipo empieza a rendir resultados.
DeAndre Hopkins mientras tanto hizo lo que sólo Hopkins puede hacer. Aunque no encontró la zona de anotación terminó el partido con 5 recepciones para 74 yardas. Pero decir que sólo atrapó cinco pases es como decir que Picasso sólo fue un pintor. Cada una de sus recepciones se dio en momento clave y su atrapada sobre la banda para dejar al equipo en distancia de gol de campo al final de la primera mitad, fue una verdadera obra de arte. Su control de cuerpo sobre la banda y el poder en sus manos para controlar y asegurar el balón es incomparable.
La defensa falló en una dos coberturas y ambas resultaron en TD para TD, Pero fuera de estas dos jugadas, el equipo acondicionó a la ofensiva de los Titans a completar pases cortos que fácilmente pudieron controlar. Marcus Mariotta, apesar de haber completado 22 de 23 pases para 303 yardas y 2 TD's, nunca presentó una verdadera amenaza. Las seis capturas de QB que acumularon los Texans sirvieron para dictar el ritmo del partido. Christian Covington tuvo su mejor partido de la temporada con sus primeras dos capturas de QB de la temporada. Limitaron a los Titans a sólo 105 yardas por tierra pero 28 de estas fueron logradas por Mariota en jugadas en las que improvisó saliendo de la bolsa de protección.
Deshaun Watson por su parte fue el ejemplo de eficiencia al completar 19 de 24 pases para 210 yardas y 2 TD. Agregó 70 yardas en sólo nueve acarreos y nunca puso en peligro el balón y manejo a la perfección el partido. Claramente fue eficiente pero no su mejor partido y el equipo anotó 34 puntos. Ajustando algunos detalles, cuidado con el cuadro ofensivo de los Texans.
Fue un triunfo redondo. Football complementario que Bill O'Brien quiere ver. En el momento determinante, los Texans se acercan a la mejor versión de su potencial. Al entrar al mes de Diciembre en esta racha ganadora de 8 los Texans se encuentran en buen momento. En lo alto, el aficionado número uno de los Texans, sin duda está muy contento de lo que el equipo de los Texans brindo a la afición.
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