Poco a poco el plantel de los Texans comienza a tomar forma. En un equipo que busca romper la barrera de la mediocridad los cambios son necesarios. Desde la llegada de Bill O'Brien la meta se ha fijado en campeonatos no sólo en temporadas ganadoras. Para lograr esto, se ha tenido que trabajar no sólo con la calidad de jugadores que lo conforman si no también con lo que cada uno de ellos aporta al equipo.

Si, se trata de su rendimiento en la cancha pero también se trata de imponer una actitud triunfadora. Se trata de una mentalidad que sirva para enfocar el trabajo diario en el NRG Stadium por parte de todos en el plantel. Pero no sólo durante los partidos si no en cada momento desde ahora hasta que se de la primera patada de kickoff de la temporada. Para lograr esto los Texans han reforzado el cuadro defensivo con dos jugadores que cumplen con cada requisito. Experiencia, calidad y liderazgo.

La defensiva entró a un nivel impresionante al final de la temporada pasada. Más halla de JJ, la defensiva secundaria marcó una diferencia importante en lo que se refiere a robos de balón. Para mantener este nivel el equipo por el momento se proyecta para regresar con tres de los cuatro titulares de la temporada pasada.

Kareem Jackson y Jonathan Joseph en las esquinas y DJ Swearinger en uno de los puestos de safety. Jackson era agente libre y los Texans hicieron lo necesario para extenderle el contrato. Joseph está bajo contrato pero muchos consideraban que el equipo la daría de baja pero este no ha sido el caso. El equipo por lo tanto decidió hacer cambios mínimos en la defensiva secundaria al agregar sólo un titular nuevo al plantel.

El cuarto puesto entre los titulares principales será Raheem Moore quien fue contratado como agente libre después de haber iniciado su carrera en Denver. Moore fue selección de segunda ronda en el 2011 después de lo que fue una carrera exitosa de tres temporadas en UCLA. De hecho en su última temporada con los Bruins, dos de sus mejores partidos y triunfos los logró precisamente en el estado de Texas.

En la segunda fecha de la temporada Moore le interceptó una pase a Case Keenum en lo que fue su triunfo de 31-13 sobre los Cougars de la Universidad de Houston, equipo que entraró al partido como el #23 del país. Una semana después de su visita a Houston, UCLA regresó al estado de Texas para visitar a los Longhorns en Austin. Moore, aportó ocho tackleos en el triunfo de los Bruins sobre Texas, el equipo #7 del país.

Con los Broncos su carrera  fue exitosa. Como la selección #13 de la segunda ronda y en tres temporadas con los Broncos, Moore registró ocho intercepciones, dos fumbles recuperados y 196 tackleos. No se puede negar que el punto bajo de su etapa en Denver fue el TD de 70 yardas que le permitió a Jacoby Jones y los Ravens en el partido de playoff Divisional en enero del 2012.

Fue un punto bajo del que aprendió y creció. Aun es joven y cuenta con experiencia en playoffs y más importante ha mejorado cada temporada. De hecho cuatro de sus ocho intercepciones las logró la temporada pasada.

Moore se incorpora a una defensiva secundaria de los Texans que logró 16 de las 20 intercepciones del equipo. Gracias a la presión de los frontales en el cuadro de Romeo Crennell, la secundaria aprovechó a lo máximo cada oportunidad. Esta contratación le brinda a los Texans un jugador con velocidad, atletismo y a penas entrando a quinta temporada y con solo 25 años de edad, un futuro prometedor.

La otra contratación del cuadro defensivo es de inmensas proporciones.

Desde que Wade Phillips incorporó una línea frontal de tres jugadores, el equipo de los Texans ha estado en busca de un tackle nariz de calidad. Un hombre de corpulencia y fuerza en el punto de ataque, especialmente en contra del juego terrestre. Esta búsqueda nunca brindó un jugador ideal para el puesto. Ahora entrando a la segunda temporada bajo la dirección de Crennell, esto ha cambiado con la contratación del veterano Vince Wilfork quien aporta no sólo calidad en el terreno pero experiencia triunfadora. En 11 temporadas como el ancla de la defensa de los Patriots, Wilfork dominó en contra del juego terrestre tal como se anticipaba al haber sido tomado en la primera ronda del draft en el 2004.

Cuenta con 16 capturas de QB y ha sido nombrado al Pro Bowl en cinco de sus 11 temporadas. Se le reconoce como uno de los mejores tackles defensivos en la liga y también como un verdadero líder en el vestuario. Esto es lo que puede ser de mayor impacto con el equipo. Se reconoce de lo que es capaz en la cancha pero considerando que ha jugado en cuatro Super Bowls, dos de los que ganó, la influencia que puede tener en algunos de los jóvenes en el plantel será importante. Conoce el esquema de Crennell y trabajará con Louis Nix, el tackle de segunda temporada que espera tener impacto en el 2015 después de haberse perdido toda la temporada pasada debido a una lesión.

Su impacto también será aprovechado por el estelar del equipo al considerar que JJ Watt nunca ha jugado con un jugador en el centro de la línea tan dominante como Wilfork.

Los Texans han sido prácticos, si no espectaculares en sus contrataciones en agencia libre. La inyección de habilidad, experiencia y liderazgo ha mejorado al equipo. Hace una temporada el equipo no se encontraba en la misma situación. Claro que todo se tiene que concretar en el terreno de juego pero por el momento ha sido más que aceptable lo que ha hecho el equipo para reforzar el plantel para esta nueva temporada.

Enrique Vasquez, se encuentra en su décimo cuarta temporada en las transmisiones de los Texans. La temporada del 2015 será su cuarta como la voz oficial en español de los Houston Texans y la temporada número 25 transmitiendo partidos de la NFL.